A través de una carta dirigida al canciller Álvaro Leyva, el extraditado Ricardo Palmera Pineda, alias “Simón Trinidad”, le pidió que hiciera gestiones para lograr su repatriación a Colombia, con el propósito de participar en la iniciativa política de “paz total” del Gobierno de Gustavo Petro y en las audiencias de la Jurisdicción Especial de Paz, JEP.
Aunque la misiva que ha circulado por las redes sociales no tiene fecha, se conoció apenas un día después de que la Oficina del Alto Comisionado para la Paz, Oacp, informara que los ministerios de Justicia y de Relaciones Exteriores tramitarán la extradición a nuestro país del exjefe paramilitar Salvatore Mancuso, para que pueda ejercer el nombramiento de gestor de paz que le hizo el presidente Gustavo Petro.
A diferencia de Mancuso, que acaba de cumplir una pena de 15 años por narcotráfico, “Simón Trinidad” apenas lleva 18 años de una sentencia de 60 en Estados Unidos, por el secuestro de tres contratistas de EE. UU. en Colombia.
“(…) Yo he manifestado interés para ser oído por la Jurisdicción Especial para la Paz y en consecuencia garantizar a las víctimas el derecho a la verdad”, redactó Palmera en su carta.
Y prosiguió: “Como ex combatiente de las Farc encuentro que el Ministerio de Relaciones Exteriores es la única entidad pública de mi país que puede articular las acciones de las distintas entidades del Estado en todos sus niveles y de los particulares cuando sea del caso, en lo que concierte a las relaciones internacionales y la política exterior de nuestro país”.
A Leyva, que en el pasado fue facilitador de procesos de paz con las entonces Farc, le expresó que “usted, como ministro de Relaciones Exteriores y Paz, es la única instancia que puede generar los canales entre la JEP y las autoridades de justicia de los Estados Unidos en torno a mi presencia en la JEP. Pero además es usted, como canciller, quien desde su condición de cabeza de las relaciones exteriores, junto con el presidente Gustavo Petro, puede solicitar al gobierno de ese país que se permita mi presencia intelectual y física en los procesos de paz que ha priorizado el presidente de los colombianos”.
Esta es la segunda vez que alias Simón Trinidad intenta que la Casa de Nariño abogue por él ante la justicia estadounidense para regresar al país.
En el pasado proceso de paz de La Habana, celebrado entre los años 2012-2016, tanto los negociadores de las Farc como los del Gobierno tocaron las puertas de EE. UU., considerando que su aporte sería valioso en la mesa de diálogos.
Sin embargo, los estadounidenses se negaron a repatriarlo, argumentando que las decisiones del poder judicial eran independientes del Ejecutivo. En el fondo, tampoco tenían disposición política para hacerlo.
Palmera es el único miembro del antiguo Secretariado de las Farc que fue extraditado y condenado en el extranjero.